Dosmilnueve toca a su fin. Ya casi estamos. Inconscientemente, me sorprendo a mi misma recapitulando episodios, aventuras y sucesos. Aunque no es de extrañar, suelo hacerlo habitualmente, me va la crónica. No creo que haya sido un mal año. Por supuesto, tuvo sus cosas, como todos. C’est la vie. Con la boca pequeña, casi me atrevo decir que ha sido bueno, en muchos aspectos. Mejorar respecto al 2008, año nefasto donde los haya (en mi caso) era fácil. Aunque quizá lo que mejor lo defina sea como un año de tránsito. Tránsito hacia lo que está por venir. Seamos optimistas.
Recibo el recopilatorio musical de Hembra Beta, con sus temitas dedicados. Gracias maja. Yo creo que ella también ha estado recapitulando. Y le cuento que yo también estoy preparando el mío, con esos temas que me han acompañado durante el año en cada uno de los momentos, de viajes y eventos. Pronto en sus reproductores, la selección me está siendo algo complicada. Lo único que tengo claro es como lo cerraré. I did it my way.
Para todos los que estuvisteis, de una u otra manera.